La micción frecuente se refiere a la necesidad de orinar muchas veces al día, pero con una cantidad muy pequeña de orina en cada episodio. Esto puede causar inconvenientes en la vida diaria y ser una señal de advertencia de una afección médica. Si experimentas esta condición, descubre sus causas y soluciones en el siguiente artículo.
La micción frecuente (orinar muchas veces pero en pequeñas cantidades) es una condición en la que el número de veces que se orina en un día aumenta significativamente, superando las 8 veces al día y más de 2 veces durante la noche. Sin embargo, la cantidad de orina en cada episodio es muy baja y no proporcional a la frecuencia de la micción.
Las infecciones del tracto urinario son una de las causas más comunes de micción frecuente, especialmente en mujeres. Las bacterias ingresan en la uretra, irritando la vejiga y causando una sensación constante de necesidad de orinar, aunque la cantidad de orina sea mínima.
Una vejiga hiperactiva provoca contracciones anormales de la musculatura vesical, lo que genera una necesidad frecuente de orinar, incluso cuando la vejiga no está llena. Los síntomas pueden incluir urgencia urinaria e incontinencia.
Los pequeños cálculos en la vejiga pueden irritar la mucosa y aumentar la necesidad de orinar. Si la micción se acompaña de dolor o sangre en la orina, es posible que tengas cálculos en la vejiga.
Los hombres, especialmente los mayores de 50 años, pueden sufrir inflamación o agrandamiento de la próstata, lo que ejerce presión sobre la vejiga y provoca micción frecuente, dificultad para orinar o goteo urinario.
Un nivel elevado de azúcar en sangre obliga a los riñones a trabajar más para eliminar el exceso de glucosa a través de la orina, causando micción frecuente.
Las mujeres embarazadas, especialmente en el tercer trimestre, suelen experimentar micción frecuente debido a la presión del feto sobre la vejiga.
El estrés y la ansiedad prolongados pueden alterar la función de la vejiga, causando micción frecuente.
Se recomienda acudir al médico si la micción frecuente persiste durante más de dos semanas y está acompañada de síntomas anormales como:
La micción frecuente a pesar de beber poca agua puede deberse a diversos factores, desde hábitos diarios hasta condiciones médicas. Si este problema afecta tu calidad de vida, es recomendable ajustar la dieta, los hábitos o acudir a un médico para encontrar la solución más adecuada.
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